RFID (Radio Frequency Identification) es una tecnología de identificación y seguimiento de objetos a través de radiofrecuencia, que consta de etiquetas y lectores RFID . Una etiqueta en un sistema RFID pasivo se denomina etiqueta pasiva y no requiere una batería interna ni una fuente de energía y depende de la energía de radio enviada por el lector para funcionar.
El mecanismo de detección pasiva implica los siguientes pasos:
1. Transmisión: el lector envía señales de radio a través de la antena. Esta señal contiene información sobre identificación y comunicación.
2. Inducción: La antena de la etiqueta pasiva recibe la señal electromagnética emitida por el lector.
3. Recolección de energía: las etiquetas pasivas utilizan la energía de radio recibida para activar los circuitos internos.
4. Identificación: después de que la etiqueta pasiva recibe suficiente energía, responde enviando su propio número de identificación único (ID). El ID único de la etiqueta suele estar preprogramado por el fabricante.
5. Comunicación: Después de que la etiqueta envía la identificación, el lector la recibe como entrada. A partir de entonces, el lector y la etiqueta pueden comunicarse dentro de una cierta distancia.
La clave de los sistemas de etiquetas RFID
pasivas es que el lector suministra suficiente energía para activar las etiquetas y comunicarse mediante señales de radio. Este mecanismo permite detectar y leer etiquetas RFID pasivas sin contacto, sin contacto directo ni reemplazo de batería de las etiquetas. Esta característica hace que la tecnología RFID se utilice ampliamente en logística, gestión de inventarios, verificación de identidad y muchas otras aplicaciones.